Características Esenciales:
– Los seguros de vida se distinguen por su dependencia del fallecimiento o supervivencia del asegurado para el pago de la cantidad acordada en el contrato.
– En la póliza se delimitan roles clave: Asegurado (cuya vida determina el pago), Tomador (contratante y pagador de la prima, que puede coincidir con el asegurado), y Beneficiario (quien recibe el capital establecido).
Clasificación según la Finalidad:
1. Seguros de Fallecimiento (o Riesgo):
– Se garantiza el pago del capital o renta a los beneficiarios designados si el asegurado fallece antes del término del contrato.
– Sin contraprestación si el asegurado llega con vida al vencimiento del contrato.
2. Seguros de Supervivencia (o Ahorro):
– Se garantiza el pago del capital o renta a los beneficiarios si el asegurado está vivo al finalizar el contrato.
– Relevancia fiscal en este tipo de seguros, variando según la legislación del país.
Modalidades Específicas:
a. Unit Link:
– El tomador decide las inversiones y asume el riesgo con las primas.
b. Planes de Previsión Asegurados (PPA):
– Acumulan capital, cubriendo contingencias como jubilación, fallecimiento, incapacidad laboral permanente y dependencia.
– Ofrecen un interés garantizado, adecuados para perfiles conservadores.
c. Planes Individuales de Ahorro Sistemático (PIAS):
– Ahorro a largo plazo con el objetivo de constituir una renta vitalicia.
– Renta no ligada a jubilación, permitiendo cobros antes de la misma con ciertos plazos.
d. Seguros Mixtos:
– Garantizan el pago del capital al beneficiario en caso de fallecimiento o al vencimiento si el asegurado está vivo.
Cada modalidad atiende a necesidades específicas, desde la protección ante eventualidades hasta la construcción de ahorros a largo plazo. Conoce más detalles sobre estas opciones en nuestra Guía para tu jubilación.
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